Como lo mencione en el tema anterior, el potencial que poseen los alrededores de Coyhaique en cuanto a roca no es menor, por lo que resulta muy difícil hacer vista gorda a esta alternativa. Recibí la invitación de mi amigo Franco para ir a probar las rutas del McKay, las cuales según él resultarían perfectas para mi iniciación. En 1 horas y 20 minutos estuvimos al pie de la pared.
Un supuesto 5.8 esperaba por mí. Sin pensarlo mucho me tire de primero punteando el primer largo sobre roca con dignos agarres y buena adherencia. Progrese pausado y bastante confianza, una actitud que todavía no logro entender...plop!
Al cabo de un rato las dos “joyas” estuvimos en la reunión. Viento patagónico, paisaje inmejorable, tallas y desorden a la orden del día, una clásica receta de la zona. Luego de un par de fotos planificamos lo que vendría.Soportando el viento helado iniciamos el descenso, primero hasta la cadena y más tarde hasta la base de la ruta., dando por terminada una impecable jornada de tipo escuela, que resulto del todo provechosa. Gracias por la confianza.
1 comentario:
buena pared hermano , nos quedan miles aún por escalar y abrir en la patagonia.
franco cayupi
Publicar un comentario