sábado, 22 de marzo de 2008

Actualidad: La Aventura del Viernes Santo

Lesionado de un dedo fue imposible para mi tomar un curso de rescate en grietas y progresión en glaciar que organizo mi club de montaña, Perros de los Andes de Temuco. Pero bueno, como dicen por ahí, no hay mal que por bien no venga, ya que tuve la oportunidad de compartir con mi hermana - a quien veo muy poco - un lindo y entretenido fin de semana santo.

A continuación detallo la actividad realizada el día viernes santo, actividad que como es la tónica de esta pagina personal, responde al deporte y la aventura. En esta oportunidad nos trasladamos muy cerca, a un centro de actividades outdoors en las afueras de Temuco.

Lo primero fue jugar un rato en un pequeño muro, donde principalmente las mujeres “desplegaron” toda su técnica y potencia. Yo me convertí en el asegurador oficial de la actividad.



El siguiente paso fue entretenerse con el cruce de un punte tibetano, solo faltaron las grandes montañas de 8 mil metros en el horizonte. Alrededor de unos 50 mts. de puente le dan vida este espacio orientado al equilibrio, y para los más soñadores, a la imaginación.



Mas tarde vino el cruce de un pasamano ubicado a una altura promedio de unos 5 metros. Bastaba solo algo de concentración y tranquilidad para hacer la travesía que lamentablemente doblego a las damas. Ya vendrá la revancha para ellas...



Cuando comenzaba a caer el sol, solo nos quedaba pendiente la última prueba de esta suerte de carrera con obstáculos poco convencionales. El Canopy resulto ser la última aventura del día, que con 4 estaciones nos permitió deslizarnos y probar la velocidad algunos instantes.



Con algunas frenadas bruscas consecuencias de la velocidad fuimos tomándole el pulso a estos tensos cables, capaces de otorgar algo de emoción y adrenalina muy cerca del hogar, y lo principal, con la posibilidad de estar junto a los que mas queremos.


Participantes del “Viernes Santo”:

Ana Poblete (mi hermana)
Nedia Ravanal (mi polola)
Agustín Pérez (mi cuñado)
Marco Poblete (Alturasur)

lunes, 3 de marzo de 2008

Desde el baúl de los recuerdos: Poesía

En alguna carpeta cibernetica de mi pc se encontraba este poema que mas bien parece una oda a la montaña (Oda: Composición poética del género lírico en la cual se expresa la admiración exaltada por algo o alguien). Les presento estas letras - que no son muchas - las cuales traté de ilustrar con imágenes de lo que a algunos mas nos gusta, "la vida en la montaña".

Necesidad, anhelo, reto
lujuria de paz en una alcoba del encanto,
cuerpo caprichoso y celestial
testigo milenario endurecido,
figura mas nunca inerte,
solo majestuosa y pensante.

(Monte Tronador, vista de la cumbre Internacional y Argentina)


Sobre ti he posado mi mirada humilde
para decorar los caminos del vértigo.
Figura inquieta y de paso continuo,
allá voy sobre la pendiente y el filo,
contra el frío y el viento de tu reino salvaje.

(Cerro Morado, alcanzando el plateau superior)


Detenido en medio de la bruma
he decidido buscar aliento,
tregua pasajera sobre un paraje memorable,
campo de batalla y lucha constante,
rabietas del atractivo,
cuerpo místico que satisface la osadía de mi espíritu.

(Volcan Llaima, descendiendo en medio de un white-out)

Sube y sube mi corazón peregrino,
mientras voy sintiendo la travesía de mi sangre,
y tu karma que inunda mi conciencia
y mi ser con su voluntad desquiciada.

(Sierra Nevada, buscando una salida de la pronunciada cara oeste)


Así voy llegando al mundo de mis sentidos,
tierra inhóspita, altar de emociones
quisquillosa, impredecible, cambiante
besadora de nubes,
amante del cielo,
tierra de éxtasis
puerto de mi deseo.

(Monte Tronador, satisfaccion en lo mas alto de la cumbre Argentina)

domingo, 2 de marzo de 2008

Coyhaique desde lo alto: Cerro Cinchao

Ubicado en la Reserva Nacional Coyhaique y al norte de la misma ciudad, se alza dominante el Cerro Cinchao, una mole de hombros caprichosos que observa este rincón de la Patagonia desde una altura de 1.361 mts.


Siempre visible desde Coyhaique, cada año me embargaban las ganas de ascenderlo, pues su fama de mirador privilegiado de estas latitudes no es menor. Finalmente este verano, cuando finalizaba el mes de Febrero, me permití ir por sus alturas, en lo que prometía ser un trekking en solitario notable.

Accedí a CONAF al medio día con intenciones de ascenderlo muy rápido, al estilo “Carreras de Aventura”. Solo vestía zapatillas, short, polera y cortaviento. Mi alimentación consistía en una barra de chocolate blanco argentino (comprado en Los Antiguos) y en una bebida de ½ litro Gatorade.


Entendiendo que el tiempo promedio de ascenso es de 3 a 4 horas, inicie la marcha a través de un marcado sendero, a ritmo rápido y sostenido. Atravesando un bosque frondoso alcancé algunas pasarelas y escalerillas muy pintorescas que de ves en cuando marcaban el inicio de una subida abrupta.


Al cabo de una media hora me interne en un nuevo sendero que indicaba el camino hasta la cumbre. A ratos muy cansado bajaba un poco el ritmo pero siempre a paso firme. Durante gran parte del trayecto estuve a la sombra del bosque siempre tupido, verde y espeso, encontrando pequeños claros que me daban una referencia de mi ubicación.


Cuando llevaba un poco mas de una hora alcancé el límite de la vegetación. El bosque terminaba rasante y dejaba a la vista la cumbre del macizo que aun se encontraba algo lejos. El transito desde aquí fue por el ya conocido acarreo que pronto me dejo en la cima del hombro oeste, mas tarde “travesie” en dirección este para detener mis pasos en la cima del Cerro Cinchao, mi cronometro marcaba 1 hora y 35 minutos.



Era cierto lo de la vista, la panorámica desde la cumbre de este caprichoso cerro es altamente extensa y estética, mejorando notablemente cuando se sube en un día maravilloso como el que yo estaba teniendo.


Con Coyhaique a la vista descansé y me hidrate pensando ya en la bajada. Un par de fotos y comencé con el descenso que termino al cabo de 1 hora en el sector de CONAF. Conclusión, un trekking muy recomendable y con una vista soberbia, muy al estilo de Patagonia.


PD: Baje el libro de cumbre que se encontraba en deplorables condiciones, para mas tarde entregarlo en CONAF y ver la posibilidad de transcribirlo.