A continuación detallo la actividad realizada el día viernes santo, actividad que como es la tónica de esta pagina personal, responde al deporte y la aventura. En esta oportunidad nos trasladamos muy cerca, a un centro de actividades outdoors en las afueras de Temuco.
Lo primero fue jugar un rato en un pequeño muro, donde principalmente las mujeres “desplegaron” toda su técnica y potencia. Yo me convertí en el asegurador oficial de la actividad.
El siguiente paso fue entretenerse con el cruce de un punte tibetano, solo faltaron las grandes montañas de 8 mil metros en el horizonte. Alrededor de unos 50 mts. de puente le dan vida este espacio orientado al equilibrio, y para los más soñadores, a la imaginación.
Mas tarde vino el cruce de un pasamano ubicado a una altura promedio de unos 5 metros. Bastaba solo algo de concentración y tranquilidad para hacer la travesía que lamentablemente doblego a las damas. Ya vendrá la revancha para ellas...
Cuando comenzaba a caer el sol, solo nos quedaba pendiente la última prueba de esta suerte de carrera con obstáculos poco convencionales. El Canopy resulto ser la última aventura del día, que con 4 estaciones nos permitió deslizarnos y probar la velocidad algunos instantes.
Con algunas frenadas bruscas consecuencias de la velocidad fuimos tomándole el pulso a estos tensos cables, capaces de otorgar algo de emoción y adrenalina muy cerca del hogar, y lo principal, con la posibilidad de estar junto a los que mas queremos.

Participantes del “Viernes Santo”:
Ana Poblete (mi hermana)
Nedia Ravanal (mi polola)
Agustín Pérez (mi cuñado)
Marco Poblete (Alturasur)